El estado de salud de una persona no depende únicamente de variables biológicas o genéticas, sino que está profundamente influido por factores psicosociales que actúan a lo largo de su vida. La psicología de la salud ha demostrado que elementos como el estrés, el apoyo social, el nivel socioeconómico, el estilo de vida y las creencias personales sobre la salud desempeñan un papel fundamental en la aparición, el mantenimiento o la prevención de enfermedades.
Estrés psicológico
Uno de los factores más estudiados es el estrés psicológico, el cual puede debilitar el sistema inmunológico, aumentar la presión arterial y favorecer conductas poco saludables como el tabaquismo o la mala alimentación. El modelo de transacción de Lazarus y Folkman, citado por Morrison y Bennett (2006), señala que el impacto del estrés en la salud no solo depende de la intensidad del evento estresante, sino de la forma en que el individuo evalúa la situación y de los recursos con los que cuenta para afrontarla.
En ese sentido, el apoyo social aparece como un recurso protector clave. Las personas con redes sociales sólidas tienden a tener mejor salud física y mental, menos riesgo de mortalidad prematura y una mayor adherencia a los tratamientos médicos. El acompañamiento emocional, la ayuda práctica y la validación social permiten reducir el impacto del estrés y promueven comportamientos preventivos.

Factores comunes
El estatus socioeconómico, que incluye el nivel educativo, el ingreso y el entorno laboral, también está estrechamente vinculado con la salud. Las personas con menor nivel socioeconómico tienen mayor probabilidad de sufrir enfermedades crónicas, experimentar condiciones laborales precarias y enfrentar barreras para acceder a servicios de salud. Estas desigualdades se relacionan con el concepto de “determinantes sociales de la salud”.
Asimismo, las creencias individuales sobre la salud, los valores culturales y las normas sociales influyen en la forma en que las personas interpretan los síntomas, buscan ayuda y siguen las recomendaciones médicas. Modelos como el de creencias en salud (Health Belief Model) explican cómo variables como la percepción de vulnerabilidad, la gravedad de la enfermedad y los beneficios percibidos condicionan la adopción de conductas saludables.
Conclusión
Los factores psicosociales constituyen un campo esencial para la comprensión de la salud humana. Su estudio permite diseñar intervenciones más efectivas y humanas, centradas en las necesidades reales de las personas y sus contextos sociales.
Referencia:
- Morrison, V., & Bennett, P. (2006). Psicología de la salud. Pearson Educación.