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Estrés laboral

El estrés, es una reacción de la cual la gran mayoría de personas ha oído hablar y tiene una interpretación sobre el mismo.

Al ser una frase que se ha vuelto común, se entiende que la mayoría de las personas ha vivido un evento estresante o conoce a una persona que ha experimentado algo similar, es decir una situación que escapa de su control y por consecuencia hubo una respuesta conductual o emocional.   

El estrés, al ser una situación más cotidiana en la actualidad, provoca que se menosprecie su verdadero impacto y se minimicen sus repercusiones.

El fenómeno del estrés

La Organización Mundial de la Salud (OMS) define al fenómeno del estrés como las reacciones fisiológicas que en su conjunto preparan al organismo para la acción (OMS, 1994). Considerado desde este punto de vista, el estrés sería una alarma, un estímulo que conduce a la acción, una respuesta necesaria para la supervivencia, respuesta que puede ser coherente con las demandas del entorno, o bien, insuficientes o exageradas.

Así al ser un mecanismo natural, el estrés es una de las tantas formas que tiene el organismo para producir una respuesta ante un estímulo, que nos prepara para una futura reacción, el problema surge cuando los estímulos estresantes son constantes, y el cuerpo no tiene un periodo de reequilibrio para recuperarse de su estado de alerta

Cólica (2012), menciona que “nadie está enfermo “de estrés”, se está enfermo “por estrés” y sólo cuando éste es prolongado.”, es decir, mediando sobre los estímulos estresantes, es posible generar respuestas mucho más adaptativas,  cabe recalcar que La palabra “stress” es un término traído de la física (stringere, que significa provocar tensión) que se utiliza para sintetizar el concepto del síndrome general de adaptación.

La tensión es su naturaleza principal

Así, podemos intuir que todos aquellos factores que de una u otra manera, provoquen una reacción de tensión (emocional, física y comportamental), puede ser entendido como un estímulo estresante, esto incluye el área laboral.

La escala de Holmes-Rahe (1976), incluye entre las situaciones vitales generadoras de estrés al  despido, reajuste en el trabajo, problemas con los jefes e hipoteca y préstamos, todos estos factores, tienen como punto principal el área laboral/profesional.

Que es el estrés laboral

Se reconoce que el estrés laboral es uno de los principales problemas para la salud de los trabajadores y el buen funcionamiento de las entidades para las que trabajan (véase, OIT 1986; 1992).

El estrés laboral/profesional es la reacción que puede tener el individuo ante exigencias y presiones laborales que no se ajustan a sus conocimientos y capacidades, y que ponen a prueba su capacidad para afrontar la situación.

El estrés también puede producirse por  situaciones laborales diversas, puede agravarse por la sensación de no recibir suficiente o total ausencia de apoyo.

Otros elementos que entran en juego son la supervisión y las relaciones con los colegas; cuando el ambiente está saturado de presión y fechas límites de entrega; también cuando hay demasiado control sobre el trabajo, o herramientas insuficientes de las cuales se dispone para hacerle frente a esas necesidades.    

El resultado del estrés laboral y profesional.

El estrés da como resultado un desequilibrio  por las constantes  exigencias y presiones, abonando a esto, genera duda por  las propias capacidades y  conocimientos,  provocando aún más frustración.. 

Esto pone a prueba la capacidad del individuo para afrontar su actividad, y no sólo incluye situaciones en que la presión laboral excede la capacidad del trabajador para hacer frente a la misma, sino también los casos en que no se utilizan suficientemente sus conocimientos y capacidades, y esto supone un problema para el trabajador (OMS,2014).

Cabe recalcar como se ha mencionado que el estrés continuo (crónico),  produce un desgaste natural, ya que las estructuras implicadas y sus efectos necesitan un periodo de re-adecuación, el cual no sucede, si no hay un espacio para el mismo.

Neurobiología del estrés

Conozcamos un poco de estas estructuras. Ante estresores psicológicos o fisiológicos, el organismo responde mediante una serie de reacciones fisiológicas coordinadas, que suponen la activación del sistema nervioso autónomo (SNA) y el eje hipotalámico-hipofisario-adrenal (HPA). En última instancia, estos dos sistemas producen la liberación de cortisol, noradrenalina y adrenalina por parte de las glándulas suprarrenales, permitiendo enlazar la experiencia subjetiva de la respuesta con componentes psicofisiológicos de la emoción. Su secreción prepara al organismo, adoptando un estado de alerta que facilita el proceso de adaptación a los diferentes eventos estresantes a los que se ven expuestos los individuos diariamente y facilitan el equilibrio homeostático (Kandel et. al, 2001).  

En el artículo  “Stress-Induced Neuroplasticity: (mal) adaptation to adverse life events in patients with PTSD – a critical Overview” de la revista Neuroscience (2014), se da la siguiente información sobre el tema “Si bien ambos factores (estrés normal y crónico) aumentan la actividad del eje HPA, pueden ocasionar efectos opuestos en el organismo. Los niveles óptimos de estrés permiten una efectiva adaptación a nuevas situaciones, potenciando además las funciones cognitivas y la consolidación de memorias que le permitirán al individuo anticiparse a futuras situaciones displacenteras. Una vez superadas las demandas, la sobre actividad fisiológica es terminada restituyendo la homeostasis sin consecuencias para la salud del individuo. Por el contrario, cuando la respuesta de estrés es inadecuada y se ve imposibilitada la reinstauración de la homeostasis, la sobreactividad del eje HPA puede provocar efectos des-adaptativos, como el deterioro cognitivo o el desarrollo de diversas psicopatologías asociadas” (Deppermann et al. 2014).

Los cambios estructurales y funcionales provocados por el estrés crónico en el encéfalo conllevan trastornos en el estado de ánimo y en las respuestas comportamentales y fisiológicas.

Efectos del estres sobre la salud física y mental

La lista de repercusiones del estres laboral sobre la salud mental incluye:

  • Frustración
  • Ansiedad
  • Depresión que pueden experimentar quienes están sometidos al estrés
  • Puede desarrollar o agravar el alcoholismo o farmacodependencia
  • Constantes hospitalizaciones
  • Alteraciones mentales como la incapacidad para concentrarse
  • Alteraciones emocionales
  • Problemas de atención
  • Problemas para poder tomas decisiones
  • En casos extremos, el suicidio.

Ya que el ser humano es complejo no puede existir alteraciones a la salud mental sin afectaciones a la salud física, aquí se puede encontrar:

A nivel gastrointestinal

  • Úlcera péptica
  • Dispepsia funcional
  • Intestino irritable
  • Colitis ulcerosas
  • Aerofagia
  • Digestiones lentas

A nivel cardiovascular

  • Hipertensión Arterial
  • Enfermedades coronarias: angina de pecho, Infarto del miocardio
  • Arritrnias cardíacas

A nivel respiratorio

  • Asma bronquial
  • Hipoventilación
  • Disnea
  • Sensación de opresión en la caja torácica

A nivel endocrino

  • Hipoglucemia
  • Diabetes
  • Hipertiroidismo
  • Hipotiroidismo
  • Síndrome de Cushing

A nivel sexual

  • Impotencia
  • Eyaculación precoz
  • Vaginismo
  • Coito doloroso
  • Alteraciones de la libido

A nivel dermatológico

  • Prurito
  • Dermatitis atípica
  • Sudoración excesiva
  • Alopecia
  • Tricotilomanía

A nivel muscular

  • Tics. calambres y contracturas
  • Rigidez
  • Dolores musculares
  • Alteraciones en los reflejos musculares: hiper-refiexia, hipor-reflexia, etc.

Otras alteraciones

  • Cefaleas
  • Dolor crónico
  • Insomnio
  • Trastornos inmunológicos: grip, herpes, etc .
  • Falta de apetito
  • Artritis reumatoide

Un trabajo saludable

Conociendo los efectos del estrés sobre el organismo , el  “trabajar bajo presión”,  no es una situación que sea adecuada romantizar con gallardía, esfuerzo personal, o capacidad para sobrecargar más de lo que se pueda.

A menudo las empresas encubren el estrés con “trabajar bajo presión” o “retos constantes”, lo cual no quiere decir que esto no deje de ser parte de cualquier trabajo, pero para ello, existen buenas prácticas de clima organizacional y bienestar psicosocial, que buscan minimizar y abordar esos efectos.      

En términos generales, un trabajo saludable es aquel en que la presión sobre el empleado se corresponde con sus capacidades y recursos, el grado de control que ejerce sobre su actividad y el apoyo que recibe de las personas que son importantes para él. Dado que la salud es un estado de completo bienestar físico, mental y social, y no solamente la ausencia de afecciones o enfermedades, (OMS, 1986).

Cómo reconocer y abordar el estrés laboral 

Entre las respuestas conductuales al estrés laboral y profesional están:

  • El estrés profesional y laboral puede estar ligado a la frustración en fracasos o pérdidas en negocios importantes (responsabilidades laborales) para la persona que lo sufre.
  • El miedo al fracaso también puede llegar luego de una promoción, ya que aumenta la percepción de obtener logros aún mayores.
  • Otro factor puede ser tener conflicto con figuras de autoridad en el ambiente laboral.
  • El desempleo o un despido pueden generar ansiedad y depresión, ya que entra el juego el futuro económico de la persona y posiblemente del grupo familiar.
  • Sensaciones de depresión y ansiedad relacionadas con quejas de insatisfacción laboral o estrés por las responsabilidades laborales.

Cómo trabajarlo

  • Para trabajar en el estrés se puede aplicar las siguientes directrices.
  • Sentirse más confiado y más competente con respecto al desempeño de las responsabilidades laborales.
  • Mejorar la autoestima y mantener el ánimo arriba a pesar de estar en situación de desempleo.
  • Mejorar la satisfacción y el desempeño laborales a través de estrategias de reafirmación personal y de manejo del estrés.
  • Lograr una evaluación más positiva del propio desempeño por parte de un supervisor.
  • Mejorar la satisfacción y el desempeño laborales a través de estrategias de reafirmación personal y de manejo del estrés.
  • Lograr una evaluación más positiva del propio desempeño por parte de un supervisor.
  • Mejorar la satisfacción y el desempeño laborales a través de estrategias de reafirmación personal y de manejo del estrés.
  •   Identificar el papel desempeñado por uno mismo.
  •   Identificar problemas personales que pueden estar influenciado su respuesta laboral.
  •   Identifica si algunas de las influencias familiares están relacionadas a las actuales causas del conflicto laboral.

Cómo iniciar

Ya identificadas las respuestas conductuales y reconocidas las directrices, se puede iniciar aplicando los siguientes objetivos para facilitar el trabajo con ambos elementos.

  • Mejorar las interacciones en el trabajo.
  • Asumir las propias responsabilidades del conflicto en lugar de proyectarlas en los demás.
  • Mejorar la asertividad.
  • Identificar el efecto provocado por el estrés profesional en los sentimientos hacia uno mismo y en las relaciones con las personas allegadas.
  •  Poner fin a los comentarios auto denigrantes basados en el fracaso laboral percibido.
  • Cooperar y aceptar la supervisión de la dirección en el contexto laboral.
  •  En dado caso el motivo sea el desempleo o futuro desempleo trazar un plan de acción y los objetivos alcanzables para obtener una fuente de empleo (ya sea propio o de terceros).
  • Busca la ayuda de profesionales y el apoyo familiar si te sientes superado por el estrés que se está experimentando.

Conclusión

El estrés laboral es en la actualidad es mucho más común, debido a los constantes cambios y retos de las economías; las empresas que den por sentado el desgaste de sus trabajadores con la premisa que es parte de sus requisitos; arriesgan su integridad funcional y financiera como empresas, sino que también ponen en peligro a sus elementos humanos; a medida que las entidades y los entornos de trabajo se transforman, el estrés proviene de nuevas fuentes; es necesario que se vigile si en las áreas de trabajo se adhieren otros elementos estresantes.

Estas recomendaciones se dirigen con propósito de mejorar los actuales cuadros de estrés que se puedan estar experimentando, es necesario recordar y recalcar que para obtener mejores resultados, es ideal buscar el apoyo de profesionales de la salud, además de hacer uso de los medios de abordaje psicosocial que por ley deben de existir en las empresas.


Fuentes: 

  • Cólica, P. (2012). Estrés : lo que usted querría preguntar y debe conocer (1a ed.). Brujas.
  • Instituto de trabajo, Organización Mundial de la Salud. (2004). La organización del trabajo y el estrés. Consultado el 10 de noviembre de 2020. https://www.who.int/occupational_health/publications/pwh3sp.pdf
  • Jongsma, A.E., Peterson, L.A. (2013). Planes de tratamiento para la psicoterapia con adultos. ELEFTHERÍA, S.L.
  • Perez, J., Echauri,M., Salcedo, A. (2002). El estrés. www.cfnavarra.es/isp
  • Spangenberg, A. (2015). Neurobiología del estrés (trabajo Final de Grado, Universidad de la República de Uruguay).  Repositorio Institucional,  Facultad de Psicología. https://sifp.psico.edu.uy/sites/default/files/Trabajos%20finales/%20Archivos/agustin_spangenberg_tfg.pdf